
Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón, María Santísima Inmaculada Madre de la Iglesia y Arcángel San Miguel
“Hermandad de los Estudiantes”
Historia
En la barroca Basílica Pontificia de San Miguel, situada en el solar en el que se alzaba la primitiva iglesia de los Santos Niños Justo y Pastor, una de las diez iglesias fundacionales de Madrid, como se recoge en su fuero de 1202, se custodia una preciosa imagen de Cristo Crucificado, obra del imaginero castellano Luis Salvador Carmona, bajo la advocación de Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón, que, por iniciativa de quien fuera su rector, nuestro querido Don José Antonio Galera de Echenique, desde 1983 era sacada en procesión por las calles y plazas adyacentes al templo, el día de Viernes Santo, en un piadoso Vía Crucis, al que acudían los vecinos del madrileño barrio de los Austrias y algunas personas vinculadas con dicha basílica.
Con el paso de los años la sobriedad del acto y la devoción con que participaban los sacerdotes y feligreses de la basílica fue atrayendo a más personas que se sumaban como partícipes del Vía Crucis o como simple público.
En 1988, varias personas devotas de este Cristo, juntamente con Don José Antonio Galera y los sacerdotes de la Basílica, pensaron que sería conveniente hacer un paso procesional que realzase la imagen de Nuestro Señor y que la dulzura que muestra su rostro muerto, fuese contemplada de la mejor forma posible, por el cada vez mayor número de personas que acudían a verle y a participar en el Vía Crucis. Así, y tras recabar la opinión de diversos expertos, se decidió encargar un paso de estilo sevillano, sobrio, de madera de caoba sin policromías, al taller de Manuel Guzmán Bejarano, reconocido artesano sevillano, con una amplia obra cofrade tanto en la Semana Santa de dicha ciudad como fuera de ella, en el que, sobre un monte liso de claveles rojo oscuro, se alzara la imagen del Redentor.
En el mes de diciembre de 1989, un grupo de devotos del Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón mayoritariamente sevillanos, muchos de ellos todavía estudiantes universitarios e incluso de bachiller, se reunía en la cripta de la Basílica, bajo la dirección de su Rector D. José Antonio Galera de Echenique, y de D. Enrique Estrada Roig, principal artífice e impulsor de la Hermandad, con el propósito de promover una actividad apostólica, atraer almas a Dios a través de la creación de una Hermandad de Penitencia de austero rigor penitencial que, a semejanza de la que tiene su sede en la Universidad de Sevilla y siguiendo los cánones existentes en dicha ciudad, pero con las exigencias y peculiaridades que le fueran propias, nutriéndose de la intensa labor apostólica, principalmente entre jóvenes universitarios, que en la Basílica se desarrollaba, dar así más gloria a Dios y a su Bendita Madre.
De esta forma nacía en la Basílica Pontificia de San Miguel, la Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón, María Santísima Inmaculada Madre de la Iglesia y Arcángel San Miguel, la “Hermandad de los Estudiantes” de Madrid, tomando como titulares de la misma la advocación del Cristo crucificado obra de Luis Salvador Carmona que se custodiaba en la basílica, la de la Santísima Virgen en su advocación de Madre de la Iglesia, y la del Arcángel San Miguel, Príncipe de la Milicia Celestial y titular del templo.
Breve parece la historia de nuestra hermandad, pues sólo son veinticinco años los que oficialmente tiene tras su erección canónica en el año 1990, pero conforme a determinados vestigios encontrados en los archivos de la Diócesis y la Biblioteca Nacional, la actual Hermandad del Santísimo Cristo de la Fe y del Perdón y María Santísima Inmaculada, Madre de la Iglesia, sita en la Basílica de San Miguel, tendría sus antecedentes con los que enlazar la actividad pastoral y de cultos en la Esclavitud del Santissimo Christo de la Luz y nuestra Señora de los Dolores, fundada en los albores del siglo XVIII.
En efecto, en la parroquia de los Santos Niños Justo y Pastor, situada en el solar en el que se levanta la Basílica Pontifica de San Miguel, se asentó en 1724 la Esclavitud, Hermandad o Congregación del Santísimo Cristo de la Luz y Nuestra Señora de Constantinopla, título éste proveniente de haber tenido su sede fundacional en el convento de Monjas Trinitarias, comúnmente llamado de Constantinopla, situado en la actual Calle Mayor, cuyas reglas y constituciones fueron aprobadas en 1709 por el Cardenal arzobispo de Toledo D. Luis Manuel Portocarrero.
La buena aceptación de los miembros de la Hermandad y el buen acogimiento del Dr. D. Francisco Martín del Campo y Carvajal, cura propio de la iglesia, motivó que se decidiese cambiar de sede canónica, pasando a ser la Iglesia de los Santos Niños la nueva sede de la Hermandad, por lo que se redactaron nuevas reglas y constituciones, de la ahora Congragación del Santísimo Cristo de la Luz y Nuestra Señora de los Dolores, aprobadas por despacho firmado por el Arzobispo de Toledo D. Diego de Astorga y Zéspedes, el 14 de febrero de 1227; recibiendo las gracias y privilegios de su Santidad Benedicto XIII.
Una vez decidido el establecimiento de la Hermandad en esta Iglesia se tomó la decisión de “ejecutar a sus expensas una muy perfecta y devota Efigie de Cristo Crucificado, y otra de Nuestra Señora de los Dolores”. Así llegó la Imagen del Santísimo Cristo de la Luz, hoy con la advocación de Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón a la Iglesia de los Santos Niños Justo y Pastor.
En las primeras ordenanzas de la hermandad del Santísimo Cristo de la Luz y Nuestra Señora de los Dolores, al igual que sucedió dos siglos y medio después en nuestra hermandad, se reconocía el derecho a que las mujeres pudiesen ser miembros de la misma, porque así “gozarán de las gracias e indulgencias de que goza la Congregación, y de las oraciones y sufragios de ella”. Aunque esta hermandad tenía como titular a la Santísima Virgen María en su advocación de Virgen de los Dolores, también tenía muy en cuenta su Inmaculada Concepción, por ello, se establecía como “primera diligencia que han de hacer (los nuevos hermanos), la de hacer voto de defender que María Santísima Madre de Dios y Señora nuestra, fue concebida sin pecado original desde el primer momento de su ser”.
En la barroca Basílica Pontificia de San Miguel, situada en el solar en el que se alzaba la primitiva iglesia de los Santos Niños Justo y Pastor, una de las diez iglesias fundacionales de Madrid, como se recoge en su fuero de 1202, se custodia una preciosa imagen de Cristo Crucificado, obra del imaginero castellano Luis Salvador Carmona, bajo la advocación de Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón, que, por iniciativa de quien fuera su rector, nuestro querido Don José Antonio Galera de Echenique, desde 1983 era sacada en procesión por las calles y plazas adyacentes al templo, el día de Viernes Santo, en un piadoso Vía Crucis, al que acudían los vecinos del madrileño barrio de los Austrias y algunas personas vinculadas con dicha basílica.
Con el paso de los años la sobriedad del acto y la devoción con que participaban los sacerdotes y feligreses de la basílica fue atrayendo a más personas que se sumaban como partícipes del Vía Crucis o como simple público.
En 1988, varias personas devotas de este Cristo, juntamente con Don José Antonio Galera y los sacerdotes de la Basílica, pensaron que sería conveniente hacer un paso procesional que realzase la imagen de Nuestro Señor y que la dulzura que muestra su rostro muerto, fuese contemplada de la mejor forma posible, por el cada vez mayor número de personas que acudían a verle y a participar en el Vía Crucis. Así, y tras recabar la opinión de diversos expertos, se decidió encargar un paso de estilo sevillano, sobrio, de madera de caoba sin policromías, al taller de Manuel Guzmán Bejarano, reconocido artesano sevillano, con una amplia obra cofrade tanto en la Semana Santa de dicha ciudad como fuera de ella, en el que, sobre un monte liso de claveles rojo oscuro, se alzara la imagen del Redentor.
Ni podemos, ni queremos decir que la Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón, María Santísima Inmaculada Madre de la Iglesia y Arcángel San Miguel, sea heredera de la Congragación del Santísimo Cristo de la Luz y Nuestra Señora de los Dolores, ni de la Archicofradía Sacramental de San Miguel, San Justo y Pastor y San Millán y Ánimas Benditas, pero la realidad es que posiblemente la providencia del Espíritu, que vela por la salud de la Iglesia y de sus miembros, inspirase a los fundadores de nuestra hermandad cuando la crearon hace veinticinco años, y así se estableciesen como fiestas y cultos principales de la misma, la de la Exaltación de la Santa Cruz, el 14 de septiembre, la festividad de San Miguel Arcángel, el 29 de septiembre, la de la Inmaculada Concepción de la Virgen, el 8 de diciembre, el Vía Crucis del viernes anterior al Domingo de Ramos, y la Octava del Corpus, junto con la salida procesional de la Hermandad, constituida en cofradía de Nazarenos, con las imágenes del Santísimo Cristo de la Fe y el Perdón y la de su Bendita Madre en su advocación de Madre de la Iglesia, el Domingo de Ramos.
Con el paso de los años la sobriedad del acto y la devoción con que participaban los sacerdotes y feligreses de la basílica fue atrayendo a más personas que se sumaban como partícipes del Vía Crucis o como simple público.
En 1988, varias personas devotas de este Cristo, juntamente con Don José Antonio Galera y los sacerdotes de la Basílica, pensaron que sería conveniente hacer un paso procesional que realzase la imagen de Nuestro Señor y que la dulzura que muestra su rostro muerto, fuese contemplada de la mejor forma posible, por el cada vez mayor número de personas que acudían a verle y a participar en el Vía Crucis. Así, y tras recabar la opinión de diversos expertos, se decidió encargar un paso de estilo sevillano, sobrio, de madera de caoba sin policromías, al taller de Manuel Guzmán Bejarano, reconocido artesano sevillano, con una amplia obra cofrade tanto en la Semana Santa de dicha ciudad como fuera de ella, en el que, sobre un monte liso de claveles rojo oscuro, se alzara la imagen del Redentor.
1989
Historico

2009
Oficial

2015
25 Aniversario

Hechos más relevantes de nuestra Hermandad
Se recibe el Paso del Cristo y se empieza a conformar la primera cuadrilla de la hermandad.
El 21 de Marzo Jueves de Pasión, el Señor estrena paso y cuadrilla de costaleros, numerosos fieles son testigos y participes en el cortejo.
- Se recibe la imagen de la Virgen produciéndose su bendición el 10 de Marzo de este año.
- La Hermandad organiza el primer Concierto de Marchas Procesionales a cargo la prestigiosa Música del Regimiento de Infantería “Inmemorial del Rey”Nº1 del Cuartel General del Ejercito dirigida por el maestro Teniente Coronel Abel Moreno Gómez.
- Se interpreta por1ª vez en dicho concierto la marcha “Virgen Inmaculada, Madre de los Estudiantes” compuesta por Abraham Pablos Medina.
- Se inaugura la capilla de los Sagrados Titulares en el interior de la Basílica
Se aprueba en Junta de Gobierno el proyecto del futuro paso de palio de María Stma. Inmaculada Madre de la Iglesia.
- Se celebra el primer cabildo de Elecciones siendo reelegido D. Enrique Estrada Roig.
- Se inaugura la Casa de Hermandad siendo bendecida por el Consiliario y Rector de la Basílica Rvdo. Dr. D José Antonio Galera.
- Como consecuencia y honor a las victimas del terrible atentado terrorista acontecido en Madrid el 11 de Marzo, durante la estación de Penitencia realiza un acto de oración en la plaza de la villa.
- Se produce cambio en la rectoría de la Basílica asumiendo el cargo de recto D. Manuel Cociña y Abella.
- Durante la octava de la Inmaculada es nombrado Hermano de Honor el Excmo. Sr. General D. Alfonso Pardo de Santayana y Coloma.
- Es nombrado Hermano de Honor el maestro Teniente Coronel Abel Moreno Gómez y asume la dirección de la Unidad de Música del Inmemorial el Teniente Coronel D. Enrique Blas quién también compone y estrena la marcha “Ave María Santísima Inmaculada”.
- Al celebrarse el 150 Aniversario del Dogma de la Inmaculada se realiza un breve acto de oración en la plaza de la Villa.
- En el marco del concierto anual de marchas se procede al nombramiento como Hermano de Honor al General D. Jorge Viñe Blanco.
- Este año se amplia el recorrido de la Estación de Penitencia hasta la Plaza de Oriente.
- Se estrena el puñal de salida de nuestra Señora realizado en oro y marfil obra de la Orfebrería Maestrante de Sevilla utilizándose materiales donados a la hermandad.
- Es elegido en Cabildo de Elecciones Hermano Mayor NHD Juan Manuel Venegas Valladares
- Tras el acto frustrado de participación de la imagen del Cristo de la Fe y del Perdón en el vía crucis solemne por motivo de la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, la hermandad es invitada a participar acompañando al virgen de Regla titular de la Hermandad de los Panaderos de Sevilla.
- La Basílica acoge numerosos actos con motivo de la JMJ.
- El miércoles santo una representación de la hermandad presidida por su estandarte y hermanos vistiendo túnica nazarena, hace estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral de Sevilla acompañando a la Hermandad de los Panaderos.
- Se produce relevo en la unidad de Música del Inmemorial siendo nombrado Coronel jefe D. Jesús Arenas, este mismo año a petición de la hermandad su Santidad el Papa concede al anterior coronel el ya General el Excmo. Sr. D Jesús de la Corte García la medalla de la Orden de San Gregorio Magno.
- En cabildo de Elecciones es reelegido Hermano Mayor NHD Juan Manuel Venegas Valladares.
- Este año la hermandad sufre un asalto y robo en su casa Hermandad siendo sustraído numerosos enseres entre ellos la candelería y jarras del paso de Palio.
- Gracias a la generosidad de la Hermandad de la Macarena de Sevilla nuestra titular luce imponente con la antigua candelería de plata de María Stma. de la Esperanza Macarena, utilizada en su paso de palio hasta mediados del siglo XX.
- Se celebra con diversos cultos y actividades el XXV aniversario de la Hermandad.